MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE: ¿Defensa de los recursos naturales frente a los megaproyectos o de los megaproyectos frente a los recursos naturales?

Hace unos días vimos por los medios de comunicación como en Brasil presentaba su renuncia la Ministra del Medio Ambiente, Marina Silva, en medio de denuncias por las dificultades que estaba viviendo en la implementación de la agenda ambiental del gobierno. Los roces entre la ministra y lo demás integrantes del gobierno comenzaron desde la implementación del Programa de Aceleración del Crecimiento, un plan de inversiones en infraestructura que incluye la construcción de una represa en la región del Amazonas a la cual Marina Silva se oponía fuertemente. Se llegó a decir por parte de representantes del empresariado que ojalá "el próximo ministro no sea tan radical como ella, que era una barrera para el desarrollo económico".

En Chile la situación aún no ha llegado a las dimensiones del gigante sudamericano, pero hay algunas luces sobre la “intromisión” de algunos ministros en temas de otras carteras. Así, hace algunos días el Ministro Secretario General de la Presidencia, José Antonio Viera Gallo señaló que “Chile no tiene otra alternativa que la hidroelectricidad y esto supone, inevitablemente, mirar hacia el sur” y llamó a “establecer un canal más expedito y técnico para la tramitación de proyectos energéticos como HidroAysen”. Estas declaraciones han sido fuertemente criticadas desde las organizaciones ambientalistas hasta por la bancada verde del Congreso que ha calificado las declaraciones del ministro como “presión indebida” e “imprudencia temeraria”.

A estas declaraciones se suman las efectuadas un tiempo atrás por el Ministro del Interior, Edmundo Pérez-Yoma quien se mostró partidario de las represas en Aysén aún cuando el estudio de impacto ambiental ni siquiera ha sido ingresado al sistema de evaluación de impacto ambiental que establece la ley, tema no menor si tenemos en cuenta que el Ministro del Interior es el “jefe” de los intendentes que lideran las COREMAS, órganos directivos regionales que deben aprobar estos megaproyectos.

Difícil tarea la de la Sra. Ministra de Medio Ambiente Ana Lya Uriarte, pues por un lado está la defensa y protección del Medio Ambiente y por otro, no trabar el desarrollo económico del país, que en definitiva, es de lo que depende mayormente el Gobierno, pues, sin desarrollo no hay trabajo, y sin trabajo el descontento social se transforma en un problema difícil de llevar. ¿Y cuáles serán las instrucciones del Gobierno? Recordemos que los ministros se mantienen en sus cargos mientras tengan la confianza del Presidente de la República, de ser así y si en definitiva la labor del titular del medio ambiente se transforma en un obstáculo a la ejecución de grandes proyectos ¿seguirá contando con la confianza de la Presidenta?

Michael Oñate

Alumno facultad de Ciencias Económicas y Jurídicas

Curso de Derecho Ambiental

Universidad de Magallanes (UMAG)

Punta Arenas